La felicidad inconsciente puede darse en las personas a las que todo parece irles bien. Como no asaltan capítulos de sufrimiento en su vida, están en un estado de bienestar donde todo permanece en equilibrio. No parecen necesitar nada que no puedan tener. Son felices pero inconscientes de aquello que permite su estado de felicidad. Sin embargo, estar feliz y Ser feliz no es lo mismo. En muchas ocasiones uno puede estar feliz, desde un punto de vista social, pero no del todo pleno.

La plenitud viene dada con las consciencia de la propia felicidad. Y esta plenitud es la Felicidad Consciente. Esta felicidad es independiente de las circunstancias ya que es fruto de la rendición, aceptación e integración de aquello que interrumpe la felicidad o bien del Reconocimiento de aquello que permite la felicidad. Cuando hay consciencia, puede haber elección. La consciencia, entendida como el Despertar, te brinda la oportunidad de conocer aquello que permite Ser feliz. La felicidad consciente, no depende de lo que ocurre, de lo que se tiene o no se tiene. Tan solo depende de la comprensión de la Verdad que la permite, independientemente de las circunstancias.

Porque para Ser feliz uno debe elegirlo. Si todavía no lo eres y eliges serlo, te interesarás por investigar qué es la felicidad y qué la permite. Te interesarás por lo que dicen los sabios acerca de que la felicidad es posible en el mundo. Si investigas, y te auto-investigas te encontrarás con verdades que te permitirán comprender. Tras las resistencias que aparecerán, está la respuesta.

Pero si esperas a serlo, el mismo estado de espera es la trampa. ¿Por qué la felicidad es algo que debes esperar? No es algo que te llega, es algo que decides. Y si no sabes elegir, si no sabes cómo, debes decidir saber.